Sexología Sustantiva

La Sexología Sustantiva, con varias décadas de trayectoria, cuyo máximo exponente es Efigenio Amezúa, e impartida principalmente en el INCISEX, es una ciencia autónoma aunque interdependiente de otras disciplinas con las que conversa e intercambia conceptos e ideas.
Se conforma básicamente en seis campos conceptuales: Sexuación, Sexualidad, Erótica, Amatoria, Pareja y Procreación. Todos/as, a lo largo de nuestra sexistencia, nos encontramos en uno o varios de estos cruces de caminos, que desde aquí clarifican la perspectiva de nuestra vivencia, que es única e irrepetible. Y este esquema es el mapa conceptual del Hecho Sexual Humano dentro del nuevo paradigma de los sexos.
La Sexuación, la Sexualidad y la Erótica se refieren al individuo, forman parte de cada uno/a; la Amatoria, la Pareja y la Procreación hacen referencia a la pareja o individuo en relación. La Sexuación y la Sexualidad nos hablan de identidades; la Erótica y la Amatoria nos hablan de orientación del deseo y cómo nos amamos; la Pareja y la Procreación nos hablan de la organización de la convivencia.
Apoyada en varias generaciones de sexólogos que desde sus comienzos tuvieron en común ver el sexo como un valor cultivable y no patologías tratables. El valor de ser sexuados.
La Sexuación es entendida como un proceso: “cómo nos hacemos sujetos sexuados, o sea, de uno y otro sexo” (Efigenio Amezúa)
Con esta Sexología se pretende dejar atrás las viejas ideas de Sexo y proponer un nuevo cuerpo teórico para salir del antiguo y problemático “locus genitalis”. Los genitales no nos dejan ver el Sexo.
El Sexo se construye, se cuida y se cultiva; no es natural del todo sino una creación nuestra y para nosotros. No es tan biológico como bio-psico-social. El Sexo es una idea de conjunto. El Sexo es un término nacido en la Época Clásica greco-latina, olvidado y recuperado en la Época Moderna.
Distinguir hombres y mujeres de machos y hembras es necesario para este concepto de sexo. Acotar el campo de estudio y su objeto es lo que hace la Sexología sustantiva y gran parte de los sexólogos desde la primera generación allá por el siglo XIX.
Hablar de Sexo es hablar de lo que nos hace ser la mujer o el hombre que somos; son identidades y relaciones. El Sexo es un fenómeno complejo y por tal, rico y variado. “El Sexo de los humanos no es un fenómeno de la naturaleza (sólo), sino del lenguaje y de la historia, de la cultura” (Efigenio Amezúa)
En definitiva, el Sexo no es sinónimo de reproducción, ni siquiera de placer ni mucho menos de genitales; estos serían conceptos diferentes o dentro de aquel. Sexus, del latín clásico, desde una idea griega, es seccionar, cortar. La condición humana se vive como sexuada; somos sexuados (cortados).
Tomar la parte por el todo es lo que ha pasado con el Sexo; sustituirlo por un órgano, los genitalia, o por un acto, la cópula, cuando todo esto puede formar parte del Sexo pero nunca ES el Sexo. Como seres cortados nos volvimos vulnerables y por tanto, necesitados los unos de los otros.

Entrevista a Efigenio Amezua

Programa Para todos, La 2. (primera parte)
Programa Para todos, La 2. (segunda parte)